La Fundació Mare Terra y la Unidad de Química Analítica y Ambiental de la Universitat Rovira i Virgili (URV) han dado un nuevo paso adelante en su colaboración, con la instalación de un medidor de aire continuo en la Escola de Natura Francolí. Este dispositivo de última generación permitirá monitorizar en tiempo real la calidad del aire en la zona, contribuyendo así a un mejor conocimiento y control del entorno.
El nuevo equipo está diseñado para detectar la presencia de compuestos volátiles orgánicos como el butadieno, el benceno y el etilbenceno, tres sustancias reconocidas por su carácter cancerígeno. Gracias a su tecnología avanzada, el medidor enviará datos automáticamente, las 24 horas del día, a través de una conexión WiFi, lo que permitirá un seguimiento constante y preciso.
La Unidad de Química de la URV cuenta con una dilatada trayectoria en proyectos de medición de la calidad del aire en toda la provincia de Tarragona, siendo un referente en este ámbito. Su participación garantiza el rigor científico y técnico del proyecto, aportando fiabilidad a los datos obtenidos y ofreciendo una base sólida para posibles acciones futuras.
Este proyecto representa un salto cualitativo muy importante dentro de la oferta de educación ambiental y sensibilización que impulsa Mare Terra. La posibilidad de contar con información actualizada y continua sobre la calidad del aire refuerza el compromiso de la entidad con la salud ambiental, la transparencia y la formación de la ciudadanía en materia ecológica.
Además, todas aquellas personas interesadas en conocer de cerca el funcionamiento del nuevo medidor pueden hacerlo de forma gratuita. La Escola de Natura Francolí estará abierta por las mañanas para visitas, donde se ofrecerán explicaciones sobre el dispositivo y su papel en el estudio y la protección del medio ambiente.
Desde Mare Terra nos sentimos profundamente felices e ilusionados de poder compartir esta gran noticia, convencidos de que será una herramienta muy positiva para nuestra ciudad y sus habitantes. Creemos firmemente que la educación y la ciencia deben ir de la mano para construir un futuro más sostenible, justo y saludable para todos.
